Se acercan las esperadas Navidades, esa época del año tan bonita en la que la gente es más generosa, más amable, más solidaria con los demás, esa época en la que repartimos más amor que el resto del año, bueno, todos no.... ¿Y por que digo esto?, ¿Todos no?, pues si, desgraciadamente todos no, y si no que se lo digan a un Valenciano al que el implacable afán recaudación del Ayuntamiento de Valencia, concretamente de la Policía Local de Valencia (PLV), esa que debe protegernos ante delincuentes ahora se convierten en agresores.
Luis Alberto, es un valenciano de 41 años de edad, nos escribía para relatarnos lo sucedido.
Luis Alberto se encontraba en la Calle Sorni en la reparación de un ascensor en el servicio 24h, teniendo su vehículo en otra calle en la Zona Azul, al tener la finca garaje propio decidió meter el coche en el mismo, realizando una parada en un estacionamiento reservado para minusválidos, parada para comprobar algo en el vehículo. Entro un instante a la finca dejando el vehículo en la plaza de minusválidos con las puertas abiertas por sí pasaba algún policía que viera que era solo un instante, ya que disponía de zona para aparcar en el garaje de la finca donde estaba haciendo la reparación del ascensor.
De repente aparece la PLV con grúa incorporada con la intención de llevarse el vehículo, con el maletero y la puerta del conductor abiertas, Luis Alberto al percatarse sale para hablar con el agente y explicarle lo sucedido, que retiraba ya el vehículo porque lo metía al garaje de la finca, el agente se dirige Luis Alberto con las siguiente palabras, "abona, abona o me llevo el vehículo". Luis Alberto sin saber a que se refería con esa frase pregunta:
-¿qué tengo que abonar? Y ¿en concepto de que?
A lo que responde el agente de la PLV:
-40€ o me llevo el coche.
Luis Alberto pregunto al agente si podia llamar a la empresa para que algún compañero le acercara el dinero que le pedia el agente de la PLV para no retirarle el vehículo pero antes de que este pudiera realizar la llamada el agente de la PLV, sin venir a cuento con los brazos cruzados en el pecho, comenzó a empujar al Luis Alberto hasta hacerle tropezar con el bordillo de la acera y casi consigue tirarlo al suelo.
Luis Alberto le pregunta al agente de la PLV que que está haciendo, que porque le está empujando, a lo que el agente de la PLV responde que él hace lo que le da la gana, palabras textuales.
Entonces al verse agredido Luis Alberto comienza a mirar en todas direcciones a ver si alguién está viendo la agresión que está sufriendo por parte de la PLV, y se percata de que el Portero de la finca donde está realizando la reparación del ascensor lo estaba viendo todo.
El agente de la PLV al percatarse de que hay testigos ante el abuso de poder del que está ejerciendo se retira hacia atras y le da ordenes al conductor de la grúa de que retire el vehiculo en cuestión.
Este agente se ha negado en todo momento a mostrar su número de placa, ha tenido que ser identificado por la matricula del vehiculo policial del que disponia en ese momento.
¿Hasta donde están dispuesto a llegar los cuerpos de seguridad del estado para cobrar ese tan ansiado plus de productividad?
¿Donde han quedado las buenas formas de la PLV?
Antes parabas a preguntarles por direcciones que no te sabias y ellos muy amablemente te ayudaban a llegar a tu destino, antes cuando veias un agente de seguridad en una cafeteria le pagabas un café y le regalabas un ''buenos días''.
Pero ahora los ves y te das a la fuga cual cuatrero, no sea que le preguntes por una dirección y te pongan una multa por pisar una raya continua...
A continuación os dejamos unas fotos donde se puede leer al completo la denuncia puesta por Luis Alberto.
Parece ser que esas son las formas últimamente. Esperemos que sea un caso aislado, pero por experiencia, sé que no es así. Deberemos seguir denunciando en el juzgado, a pesar de las tasas.
ResponderEliminartasas para denunciar...policias q hacen lo q les da la gana.... un ayuntamiento que se lo permite y unos politicos que favorecen este comportamiento....en fin
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ResponderEliminarEL perro siempre defiende al amo nunca ateniende a la razón
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